La ola de protestas se produjo luego de que el mandatario anunciara su decisión de eliminar los subsidios a los combustibles. Hasta el momento dos personas han perdido la vida, durante las manifestaciones; por otro lado, la Ministra de Educación Montserrat Creamer anunció este martes 8 de octubre, la suspención de clases en todo el territorio nacional, para evitar exponer a los alumnos a cualquier eventualidad que se pueda desatar.
Los manifestantes indígenas llegaron a la ciudad capital y tomaron la Asamblea Nacional, al grito de "¡Fuera Moreno fuera!". Rompieron la cerca de seguridad, ondeando las banderas de su país, vestidos con ponchos y bastón en mano, ingresaron al edificio, segun informaron medios locales.
Miembros de la Policía Montada, ayudaron a las fuerzas de seguridad de Quito, para controlar la situación, lanzando gases lacrimógenos. Por su parte, los dirigentes de los grupos indígenas llamaron a la calma a sus seguidores, para evitar cualquien incidente violento que pueda generarse; anunciaron que repudian totalmente cualquier hecho vandálico que se desarrolle durante las protestas.
Como antecedente más reciente, se tiene la muerte de Marco Oto de 26 años, con el que se suman a dos los fallecidos por enfrentamientos durante la manifestaciones. Según un comunicado de la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos (Cedhu), Oto habría quedado atrapado, entre una puerta metálica y agentes motorizados en un paso peatonal elevado, del cual se presume que él y otro manifestante cayeron. El deceso del joven se produjo en el hospital.
Alrededor de 450 personas ya han sido detenidas, según informaron medios del mencionado país, además de que las universidades y carreteras está paralizadas. Pese a todo eso, el gobierno anunció que no cederá ante la petición de los manifestantes, y acusó al presidente venezolano Nicolás Maduro, y al expresidente Rafael Correa, de estar detrás de todas estas movilizaciones en su contra.